Y tengo poco, de hecho no sé si es poco, creo que tengo algo y no sé el qué, al menos, de momento.
Suelo saber que decir a alguien, y suelo parecer agradable, o al menos así era yo cuando era una niña
o adolescente, mi corazón se había ido enfriando y por todo lo que me han hecho no me han quedado ganas
de relacionarme y aún intento recuperar lo que era. Necesito algo malo para que algo bueno venga, lo sé y
no me importa. Quizá las cosas solo salen como deben de salir